Zero waste travel: cómo generar menos basura mientras viajas

El 2018 estuve tres meses viajando por Europa y Marruecos, desde Brasil (mi país). Seis vuelos en total. ¿Parece poco? ¡Pues calculo que he generado 2.890 toneladas de carbono en este viaje!
No voy a dejar de viajar en avión, ni creo que alguien lo haga. Pero la verdad es que el transporte aéreo es un problema para el medio ambiente y durante mucho tiempo he estado pensando en cómo disminuir este impacto.
Fue en un viaje que hice a fines de 2016 que se plantó una pequeña semilla en mi cabeza. Ese año, la mayor parte de mi itinerario se realizó por vía aérea y seguramente he contribuido para generar (más) algunos cientos de toneladas de carbono.
Además de que me haya parecido agotador el sube/baja de aviones, era malo para el medio ambiente … De ahí, quedé pensando en cómo reducir este impacto.
Poco tiempo después, he descubierto el concepto de “zero waste” o desperdicio cero y, tras empezar a adoptarlo en mi vida diaria, pensé que debería ser posible hacer algunas adaptaciones para que la idea se aplicara también a los viajes, según el concepto de “zero waste travel“.
¿ Cómo adoptar el zero waste travel?
He hecho muchos cambios graduales en mi vida. Siempre había usado bolsas reutilizables, tenía un filtro de arcilla en casa para evitar comprar agua en recipientes de plástico y rechazaba pajillas y servilletas innecesarias en la calle, pero descubrí que podía hacer aún más para generar menos desechos. Y que era sencillo hacerlo.

¿Pero qué tienen que ver los viajes con el desperdicio cero? Después de todo, el turismo es una industria que genera muchos desechos en este mundo y estamos aquí, año tras año contribuyendo a esto…
Es posible que no conozca el impacto de un simple viaje para el medio ambiente, pero los números son dolorosos. El 2016, las aerolíneas produjeron más de 5.2 millones de toneladas de residuos. Estos datos incluyen comidas a medio comer, envoltorios de plástico desechables, cepillos de dientes sin usar, servilletas, basura de baño y mucho más.
El destino de la mayoría de estos desechos son los vertederos y la incineración. El reciclaje es raro.
Y esta es solo una de las basuras que se producen cuando viajamos. Muchas veces, sin saberlo, terminamos desechando envases y otras cosas equivocadamente en el lugar que visitamos, por falta de conocimiento.
Eso pasa porque cada ciudad tiene su propia forma de clasificar y recolectar materiales y es normal estar confundido al respecto. Agregue a eso los kits de viaje (desechables y llenos de plástico), los recuerdos innecesarios, la comida rápida que se compra, los boletos de viajes… Y ya hemos recaudado ahí una montaña de basura más grande que el Everest!

Si no se puede eliminarla, al menos podemos comenzar a cambiar nuestras actitudes para que se genere cada vez menos basura. ¿Como?
Ideas para reducir el impacto de un viaje:
- Prefiera la tarjeta de embarque digital: se estima que un correo electrónico emite 4 gramos de CO2, mientras que una hoja de papel impresa emite 140 gramos. Además, los boletos en papel se convierten en basura en el mundo real, mientras que los electrónicos se pueden eliminar fácilmente de su bandeja de entrada.
- Solamente equipaje de mano: aprovecha el hecho de que muchas aerolíneas cobran por el equipaje documentado y viaja sólo con equipaje de mano. Esto ahorra una pegatina más (enorme) que se desperdiciaría e incluso reduce el peso de la aeronave (lo que ayuda a reducir los costes de combustible y la huella de carbono).
- Botella de agua: tener una botella reutilizable es excelente. Si viajas en avión, puedes rellenarlas en las fuentes de agua potable del aeropuerto después de pasar por el control de seguridad (suelen estar cerca del baño) o pedir a los asistentes de vuelo que llenen tu botella durante el vuelo.
- Vaso reutilizable: para beber jugo, café, vino u otras cosas en el avión o tren, vale la pena llevar siempre su propia taza o vaso reutilizable. Recuerda que los vasos de plástico representan la mayor parte de los desechos generados en la aviación.
- Rechaza las mantas y los auriculares: esto es fácil, solo trae sus propios auriculares y viaja con ropa abrigada. Aunque son reutilizables la mayoría de las veces, estos artículos vienen envueltos en plástico, lo que crea un envase más innecesario.
- A la hora de la comida en el avión: come toda la comida que se sirve y lleva contigo los reciclables del vuelo para tirarlos en el contenedor que corresponda. Esto asegura que tendrán el destino correcto ya que muchas aerolíneas no separan sus desechos.
- Di NO a los amenities de hoteles: estoy segura de que puedes llevar tus propios productos de higiene – y que seguramente son mejores de los que tu hotel podrá ofrecer. Además, no van a generar más envases innecesarios.
- Lee sobre reciclaje: es imposible dejar de generar basura por completo, pero lo que podemos hacer es asegurarnos de enviar los desechos para el reciclaje correctamente. Antes del embarque, haz una investigación rápida sobre cómo funciona el reciclaje en su destino o pregunta sobre ello en tu hospedaje.
- Lleva tu bolsa: si no la olvidas cuando estás en casa, ¿por qué la olvidarías cuando viajas?
- Elige transportes más sostenibles: el autobús y el tren son los mejores medios de transporte para viajes largos, seguidos por los coches. Si te atreves a entrenar tu portugués, no dejes de leer sobre las principales diferencias de los transportes en mi blog, Quase Nômade.
Más que adoptar el zero waste travel, hay muchas otras actitudes que puedes agregar a tus viajes para que sean más sostenibles, como participar en clean-ups, evitar el turismo con animales o consumir localmente, potenciando el mercado de proximidad.
¿Por dónde empezarás?

Author: Mariana Dutra
Website: https://quasenomade.com/