Lituania: uno de los pocos países de la UE para viajar barato

Todavía quedan algunos países de la Unión Europea donde se puede viajar de forma económica, sin tener que hacer cambio de moneda. Lituania es uno de ellos. Fue la primera de las repúblicas bálticas en declarar su independencia de la URSS hace poco más de 30 años. Es uno de los últimos países que se incorporó a la Unión Europea y hace menos de 10 años que usan el euro. Todo aún es muy comunista, incluso el carácter de su gente, y es un país muy poco conocido por los turistas. En este post os vamos a explicar qué ver y hacer en Lituania más allá de su capital y el castillo de Trakai.
Un viaje a Lituania es ideal para aquellas escapadas de 4-5 días y puentes ya que está relativamente cerca (3 horas de avión directo desde Barcelona y con compañías low cost), es un país pequeño y es un destino muy económico. ¡En Lituania aún se pueden tomar cervezas por 2 euros!
Uno de los puntos más peculiares del país es el istmo de Curtlandia, una formación de dunas en el mar Báltico que hace de frontera con Rusia (Kilingrado). Es una de las dunas más grandes de Europa y es Patrimonio de la UNESCO. En Nida, el pueblo costero dentro del istmo, hay la casa del escritor Thomas Mann.
La época ideal para visitarlo es en verano, de abril a octubre, porque los inviernos son largos y duros, con temperaturas que pueden llegar a menos 20 grados. A partir de enero, suele estar siempre nevado y los lagos helados para patinar. Es un país super plano, lleno de lagos y bosques tupidos.
Tienen una perdición especial por las cruces y los ángeles. Cerca de Trakai hay una colina llena de amuletos de ángel y cerca de Klaipedia, una colina llena de cruces.

Si os gusta la historia, la historia reciente y especialmente la Guerra Fría, en Lituania podréis visitar una base de misiles de la URSS, enterrada bajo tierra. Otra de las visitas que os proponemos es en la ciudad de Elektrenai, donde hay abandonado el parque de atracciones soviético que sirvió para rodar la serie Chernobyl.
En la capital, Vilna, podréis ver una exposición sobre la Via Báltica, en la torre Gediminas, la movilización popular que unió de las manos las tres repúblicas bálticas para pedir su independencia de la Unión Soviética. También se puede visitar el museo de la antigua prisión del KGB.
En Kernavé, a una horita de Vilna, hay un conjunto de colinas peladas cubiertas de césped que parecen el país de los Teletubbies.
Y para peculiaridades, el barrio de Uzupis en Vilna, un barrio de artistas bohemios que se declara como una república independiente y que tiene su propia constitución donde solo está permitido amarse sin preocupaciones.

No os podéis ir sin probar los kibinai (una especie de empanada tanto dulce como salada), los cepelinai (una especie de dumpling hecho con puré de patats y carne) o la guira, una bebida parecida a la cerveza pero más suave (tiene poco alcohol) hecha de la fermentación del trigo, avena y centeno.
En nuestro blog, El món ens espera, podréis encontrar tres artículos con recomendaciones y otras actividades para conocer mejor Lituania. Léelo aquí.

Author: elmonensespera
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